VALORES DEL VARHOP

Concepto Valores Normales Significado Interpretación valores anormales OJO
Armonico Básico 500 Aburrimiento, falta de motivación, Menos de 150
Estres Geopático 0 Posible Disturbio electromagnético y geopatía 1 o Más
Voltaje 80 - 100 Actividad suprarrenal Cansancio, falta de energía, depresión Menos de 60
Amperaje 80 - 100 Actividad cerebral, sueño y descanso Falta de memoria, Insomnio, cansancio mental Menos de 60
Resistencia 80 -100 Inmunidad y Autoestima Inmunidad baja, infecciones, autoestima baja Menos de 60
Oxidación 80-100 Oxigenación celular Cansancio, envejecimiento Menos de 60
Presión Protónica >65<75 pH acido-base Acidosis metabólica por exceso de toxinas en la matriz extracelular MEC de Pischinger. Alcalosis dificultad para absorber minerales alcalinos (Mg, Ca, litio, sodio, potasio) Menos de 65 y más de 75
Conductancia >60 Conducción de señales eléctricas entre células, Presencia de sodio, potasio y cloro en los tejidos Neuropatía diabética, cardiopatía, arritmia, disfunción muscular, estrés crónico, ansiedad o trastornos neurológicos, enfermedad arterial periférica si hay frío o entumecimiento en extremidades. Trombosis venosa profunda, linfedema.
Trastornos de termorregulación. Menos de 50
Inductancia >60 Sensibilidad electromagnética y Geopatías Fatiga, insomnio o dolores de cabeza. Menos de 50
Reactancia >60 Integridad de las membranas celulares y la hidratación de los tejidos Daño celular o pérdida de masa celular. Menos de 50
P. eléctrica >60 Potencial de la membrana celular en especial neuronas y células musculares Alteraciones del potencial eléctrico por distribución desigual de iones de sodio, potasio, calcio y cloro, puede dar problemas graves de salud. Menos de 50

VALORES COMPLEMENTARIOS EN EL VARHOP

Concepto Valores Normales Significado Interpretación valores anormales OJO
Impedancia >1599 alto >1199 moderado <1200 bajo <1000 preocupante <300 Muy preocupante Función celular Deshidratación o retención de líquidos (edema). Pérdida de masa muscular, envejecimiento o enfermedades crónicas. Menos de 1000
Fase de Respuesta >900 Ideal >700 -900 Normal <500 débil <300 Preocupante <299 Muy preocupante Capacidad de Reacción ante diferentes estímulos internos o externos (estrés, inmunidad, sexualidad, medicación, etc.) Importante en enfermedades autoinmunes o inmunodeficiencias Menos de 300
Fase de Ángulo >7: Ideal, 6: Normal, <6 Crónico. Salud celular, el estado nutricional y la hidratación. Desnutrición, enfermedad en proceso. Menos de 6
ISO
Frecuencias Resonantes del Sistema >14999 <1500 <1000 Capacidad resonante para regular la neuroestimulación y celular Baja salud celular, poca neuroestimulación, efectos negativos en corazón y sistema nervioso por malos estímulos externos. Menos de 1000
Frecuencia Resosnate de la persona Capacidad de interactuar energéticamente con el entorno y la biología Problemas fisiológicos y energéticos poco bienestar integral.
Fase Selye Fases: Normal, de Alarma, Resistencia, Agotamiento. Grado de estrés ALARMA: Respuesta Inmediata: lucha o huida. RESISTENCIA: Adaptación al Estrés alto nivel de cortisol para mantener el nivel de energía, reduce la inflamación, sostiene la inmunidad. AGOTAMIENTO: Colapso de Recursos ALARMA, RESISTENCIA, AGOTAMIENTO

VALORES COMPLEMENTARIOS EN LA SINAPSIS

Concepto Valores Normales Significado Interpretación valores anormales OJO
Fase de Ángulo >7: Ideal, 6: Normal, <6 Crónico. Salud celular, el estado nutricional y la hidratación. Desnutrición, enfermedad en proceso. Menos de 6
Fase de Respuesta >900 Ideal >700 -900 Normal <500 débil <300 Preocupante <299 Muy preocupante Capacidad de Reacción ante diferentes estímulos internos o externos (estrés, inmunidad, sexualidad, medicación, etc.) Importante en enfermedades autoinmunes o inmunodeficiencias Menos de 300
Impedancia >1599 alto >1199 moderado <1200 bajo <1000 preocupante <300 Muy preocupante Función celular Deshidratación o retención de líquidos (edema). Pérdida de masa muscular, envejecimiento o enfermedades crónicas. Menos de 1000
Reactancia 1: Moderado, Integridad de las membranas celulares y la hidratación de los tejidos Daño celular o pérdida de masa celular.
Frecuencias Resonantes del Sistema >14999 <1500 <1000: Debil Capacidad resonante para regular la neuroestimulación y celular Baja salud celular, poca neuroestimulación, efectos negativos en corazón y sistema nervioso por malos estímulos externos. Menos de 1000
Vitalidad Celular >6 Normal <5 Débil <3 Crónico Funcionamiento óptimo celular, para obtener energía, reproducirse y adaptarse eficientemente. Poca vitalidad, baja resistencia a enfermedades, envejecimiento, metabolismo bajo, mala respuesta al estrés, baja capacidad para reparar tejidos.
Grasas Corporales >50 Alto >15 Normal <15 Bajo EXCESO: Riesgo cardiovascular, diabetes tipo 2 e hipertensión, problemas articulares y limita la movilidad. Afecta la autoestima y la salud mental. DEFICIENCIA: Desequilibrios hormonales y reproductivos. Debilita el sistema inmune y reduce la absorción de vitaminas A, D, E, provoca fatiga y debilidad muscular.
Reactividad centesimas por seg. Respuesta a estímulos internos y externos Desafinación relativa: Poca flexibilidad y adaptación, desajustes entre sistemas, resistencia al cambio, mala sincronización y disarmonía.
Afinación Relativa 97: Bueno Capacidad para regular funciones y mantener el equilibrio. Baja homeóstasis, baja recuperación, poca coordinación neuromuscular, baja sincronización biológica, mala interacción entre los sistemas nervioso, circulatorio y endocrino.
ISO 150 muy alto

El VARHOP es una herramienta fundamental cuando se sabe interpretar.

Con una sola medición, te permite obtener una radiografía instantánea del estado integral del paciente en su primer contacto.


Leer correctamente sus valores te otorga un poder clínico valioso:
no solo revela las condiciones físicas actuales, sino también el estado emocional, el funcionamiento metabólico, el nivel de estrés, los indicadores energéticos y espirituales, e incluso posibles tendencias hacia desequilibrios futuros.


De forma particular, destaca por su capacidad para identificar disturbios electromagnéticos, esos grandes saboteadores invisibles de la salud.

A continuación, te presento algunas variables clave del VARHOP para que comiences a entrenar la mirada y aprendas a detectar, de un vistazo, el terreno sobre el que camina tu paciente.

Aunque todos los valores del VARHOP deben analizarse de forma integral, los tres valores iniciales (VAR) van a ser nuestra guía principal.


ALTERACIONES EN EL VOLTAJE

El Voltaje. Este valor representa el estado funcional de las glándulas suprarrenales, responsables de regular hormonas clave como la adrenalina, noradrenalina y cortisol. Estas hormonas están íntimamente relacionadas con la respuesta al estrés y la energía disponible en el organismo.

Pero las suprarrenales no actúan solas. Trabajan en sincronía con la tiroides y las gónadas sexuales, formando el llamado eje HHT (hipotálamo-hipófiso-tiroideo/gonadal/suprarrenal). Este eje es el que regula, entre muchas otras funciones, el metabolismo general del cuerpo.


Por eso, cuando el voltaje está por debajo de 80, podemos decir que la energía vital del cuerpo está comprometida, y que posiblemente hay un bajo funcionamiento de las glándulas suprarrenales, lo cual afecta directamente la capacidad de respuesta, adaptación y recuperación del organismo.


Amperaje: sueño, descanso y regeneración

El Amperaje, segundo valor en importancia, está vinculado a la actividad cerebral, el descanso y la calidad del sueño. Este parámetro nos da información sobre la producción de melatoninaserotonina y otros neurotransmisores y hormonas implicadas en los procesos de reparación que ocurren durante el sueño profundo, que en el fondo complementan la segundo metabolismo (metabolismo basal), por así decirlo.


Un amperaje bajo suele estar relacionado con trastornos del sueño, dificultad para descansar de forma reparadora, fatiga crónica y alteraciones en el estado de ánimo. Si no dormimos bien, no nos regeneramos; si no nos regeneramos, no hay energía suficiente al día siguiente. Así de claro.


Resistencia: el escudo de la vida

La Resistencia es, curiosamente, uno de los valores más reveladores. Se relaciona con la eficiencia del sistema inmunológico, el cual es mucho más que una barrera contra virus y bacterias: es una expresión directa de nuestra vitalidad, conexión con la vida y autoestima.


Cuando una persona atraviesa situaciones emocionales intensas o prolongadas —como tristeza, desvalorización, duelos o estrés—, este valor suele descender significativamente. En ese sentido, hemos observado una fuerte relación entre una baja resistencia eléctrica y procesos de desmotivación, falta de propósito y baja autoestima.


Podríamos decir, sin exagerar, que el sistema inmune no solo nos defiende del exterior, sino que responde a nuestro interior: nuestras creencias, emociones y sentido de vida.


Por lo tanto, cuando el Voltaje y la Resistencia están por debajo del Amperaje, podemos inferir la presencia de un estado depresivo o, al menos, una tendencia hacia la tristeza profunda.

¿Por qué?
Porque un 
voltaje bajo indica que las suprarrenales —nuestras baterías biológicas— están funcionando con dificultad, lo cual limita la energía vital.
Y una 
resistencia disminuida suele reflejar una desmotivación profunda, una autoestima comprometida, o una pérdida de sentido.


Cuando ambas fuerzas —energía y motivación— están por el suelo, y el amperaje (sueño y actividad cerebral) aún se mantiene, el cuerpo puede seguir funcionando, pero el alma se arrastra.
Así, esta combinación nos da una clave importante para sospechar un proceso depresivo, cuya intensidad dependerá del grado de alteración de los valores.

SOSPECHAS DE UNA DEPRESIÓN
Cuando el Voltaje y la Resistencia están por debajo del Amperaje, podemos inferir la presencia de un estado depresivo o, al menos, una tendencia hacia la tristeza profunda.

¿Por qué?
Porque un 
voltaje bajo indica que las suprarrenales —nuestras baterías biológicas— están funcionando con dificultad, lo cual limita la energía vital.
Y una 
resistencia disminuida suele reflejar una desmotivación profunda, una autoestima comprometida, o una pérdida de sentido.


Cuando ambas fuerzas —energía y motivación— están por el suelo, y el amperaje (sueño y actividad cerebral) aún se mantiene, el cuerpo puede seguir funcionando, pero el alma se arrastra.
Así, esta combinación nos da una clave importante para sospechar un proceso depresivo, cuya intensidad dependerá del grado de alteración de los valores.

SOSPECHAS DE ansiedad


Cuando el Voltaje se encuentra por encima del Amperaje, y este, a su vez, supera a la Resistencia, estamos probablemente ante un cuadro de ansiedad en fase activa.

Esta configuración refleja un cuerpo con mucha energía movilizada (voltaje alto), pero con dificultades para descansar o desconectar (amperaje más bajo), y con un sistema inmunológico o emocional frágil o desbordado (resistencia aún más baja).


Si además el análisis VARHOP muestra una fase de Selye superior a "Alarma" —por ejemplo, en fase de Resistencia prolongada o Agotamiento—, el panorama se complica. El paciente suele expresar sensaciones como:
"Quiero, pero no puedo", "siento que algo me empuja pero no sé hacia dónde", o "mi cuerpo va por un lado y mi mente por otro".


Esta fase de ansiedad puede ser una antesala de una depresión en desarrollo, ya que el desgaste suprarrenal sostenidotermina agotando los recursos físicos y emocionales del organismo.
La chispa se convierte en fuego... y luego en cenizas.


PREoCUPACIÓN EN FASE TEMPRANA


Cuando el Amperaje se encuentra por debajo del Voltaje y la Resistencia, nos encontramos ante una fase temprana de preocupación, una agitación mental que aún no se ha traducido en síntomas físicos evidentes, pero que ya comienza a alterar el equilibrio interno.


En muchos casos, la fase de Selye puede estar dentro de lo normal, pero si se encuentra en fase de Alarma, es un signo claro de que la persona está atravesando una mezcla de miedo, incertidumbre y desgaste mental sostenido de forma declarada.


Este patrón genera una disminución del Amperaje, reflejando una sobrecarga en la actividad mental-cerebral. Además, los campos polimórficos suelen mostrar alteraciones en la esfera mental en comparación con el resto de los campos, lo que indica que la sobrecarga está actuando principalmente a nivel psicoemocional y un desgaste mental.


Es fundamental verificar si no hay disturbios electromagnéticos, para descartar factores externos como geopatías u otras influencias eléctricas que puedan estar condicionando esta alteración.


Saber que nuestra paciente se encuentra en esta fase nos abre una gran oportunidad terapéutica: Facilitar el diálogo, propiciar la escucha activa y crear un espacio donde las preocupaciones puedan ser expresadas sin juicio. Muchas veces, el solo hecho de sentirse acompañada, vista y comprendida, produce un cambio de perspectiva más potente que la terapia física por sí sola.


Aquí, el acompañamiento consciente es medicina. La biorresonancia es una gran herramienta, pero el alma también necesita ser escuchada.


VALORES PREOCUPANTES DEL VARHOP


Cuando los tres valores del VARHOP (Voltaje, Amperaje y Resistencia) están por debajo de 50, podemos hablar de una cronificación del problema que trae al paciente a consulta. En este punto, es necesario ser claros y honestos: se requiere un abordaje intensivo, continuo y bien estructurado para restablecer el equilibrio.


Es recomendable explicar al paciente que será necesario un seguimiento riguroso hasta que los valores se recuperen —idealmente, por lo menos entre 80 y 100 unidades. Como este tipo de tratamiento puede tener un impacto en su economía, es fundamental hacer énfasis en que el compromiso terapéutico es clave para lograr avances reales.


Si alguno de los valores llega a 0 o incluso a negativo (-0), estamos ante una señal de grave preocupación. Esto indica un estado de colapso energético o inmunológico que requiere intervenciones inmediatas y regulares, con sesiones cada 3 a 7 días, ajustando la frecuencia a medida que se observa mejoría en la respuesta del organismo.



Aquí no se trata solo de aplicar frecuencias, sino de sostener al ser humano con presencia, claridad y constancia.

La continuidad es medicina cuando la vitalidad está ausente